Los doctores pueden aconsejar la amniocentesis para mujeres embarazadas mayores de 35 años porque, a esa edad, el riesgo de que el feto tenga defectos genéticos es más alto que el riesgo de la amniocentesis. Los doctores también pueden aconsejar la amniocentesis para mujeres menores de 35 años que son portadoras de enfermedades genéticas o que tienen historia familiar de enfermedades genéticas.