Acuéstese de espaldas con una pierna doblada, un pie plano en el piso y la otra pierna extendida hacia el frente.  Levante la pierna extendida hacia arriba hasta que sienta un estiramiento leve a lo largo de la pierna. Ponga las manos detrás de la rodilla y ayude a levantar y sostener la pierna. Si tiene dificultad para alcanzar las rodillas, coloque una toalla debajo de la rodilla o muslo y sosténgase de ésta. Mantenga esa posición por 5 segundos. Lentamente baje la pierna al piso y relájese. Repita 5 veces. Cambie de pierna y repita los pasos anteriores.