La bronquiolitis es una enfermedad contagiosa. Esto quiere decir que se transmite de persona a persona. Es mucho mejor prevenir la bronquiolitis que tratarla. Usted puede evitar que su niño contraiga infecciones virales lavándose bien las manos y evitando el contacto con otras personas que tengan síntomas parecidos a la gripe o que tengan bronquiolitis.